Nuestra gran Plaza Mayor, luego bautizada Plaza de Bolívar, tiene en su costado oriental la Catedral Primada junto a La Capilla del sagrario y luego hacia el sur el Palacio Arzobispal.
Si imaginamos ese marco de hoy para los principales acontecimientos de la que esas paredes fueron testigos, debemos saber que cuando ocurrieron los notables incidentes del 20 de julio de 1810 y luego la llegada triunfal de los libertadores, Bolívar y Santander a la plaza, la catedral apenas estaba en cimientos para reconstruirla, no así la Capilla del Sagrario que debió servir de sustituto para las magnas celebraciones religiosas. Curioso es observar el trabajo al óleo del pintor que incluye la Catedral como telón de fondo tras la Casa del Florero, la tarde en que Antonio Morales trompeo a Gonzales Llorente. Luego aparece el gran mural en el paraninfo de la Casa Bolivariana, obra del pintor Cervantes. En esta magnifica obra, luce esplendida nuestra Catedral, que por esos días, brillaba por su ausencia. El magno templo fue terminado en 1823.